HIJA: Bueno, por fin estamos solos. Ha sido difícil coincidir contigo. Sé que tienes una agenda muy apretada... (pausa) O quizá no tanto. Dani me dijo que lo intentó también. Quedar contigo. Dijo que lo intentó la semana pasada y no pudo. Pero, claro, Dani... (se miran durante un rato. hasta que el padre baja la mirada). Es decir, desde niños siempre fui yo la más impulsiva, la que movía todo. ¿Recuerdas? (el padre asiente). Hubo una vez que Dani se perdió en el barrio y yo reuní a diez amigos y organicé una partida para encontrarle antes de que os enteráseis, y al final estaba en un bar, y el camarero le cuidaba porque Dani no sabía decirle dónde vivía... ¿Recuerdas? Dani siempre ha necesitado ayuda. (pausa) Tú lo sabes (pausa) Pero yo siempre... Es decir, me parece feo que no le quisieses ver... pero eso, al final yo siempre me las he arreglado para conseguir lo que quiero. Se me da bien... Sí, también de Mamá y de ti. Siempre con cara de niña buena... Pero hoy no voy a poner cara de niña buena. Quiero que me cuentes. Mírame. ¿Es cierto lo del hospital? (Él se revuelve en el sillón, pero le mantiene la mirada). ¿Y lo del abogado? (Pausa) Pero qué idiota soy, no te he ofrecido nada. Te saco una cerveza. (sale) (En off) ¿No tienes ninguna fría? Ah, si, aquí están. (Entra) Sabes que yo no soy Mamá. Puedes contarme. No le diré nada a ella si no quieres. Pero a Dani sí. A Dani... No sientas vergüenza conmigo. (pausa) Nos conocemos desde que nací. (Él titubea, pero al final se levanta. Abre un cajón y saca un informe médico, con nuevos titubeos, se lo entrega a ella. Lo lee en silencio). Entiendo. Lo que me duele en realidad es haberme tenido que enterar por terceras personas. Es haber escuchado a mis tíos especulando entre ellos sobre si era cáncer, o cirrosis, o SIDA. (Él se va hundiendo cada vez más en el sillón) Y tú sin decir nada. Y todo porque la tía Vera se cruzó contigo de casualidad. Si no... si no no nos enteramos nunca. Lo habrías ocultado... y punto. Yo no soy Mamá. No soy como ella. No sé cuántas veces te lo he dicho. Y Dani menos. Dani... Joder es que me da rabia. Dani sólo necesitaba un poco más de ti, de tu presencia. Es un trozo de pan, y tú... le has faltado. Mucho. Y yo... Ahora... Porque entonces nosotros... Es decir, si es cierto esto entonces ¿También lo del abogado? Porque es el peor momento. Y Dani te necesita más que nunca.
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